Escuchar (interiorizar) al Maestro por excelencia: Jesucristo, por verdadero, eterno y fiel, es una tarea que nos salva y que deberíamos practicar todos y atender todo cuanto nos dice. Ya que es Palabra Divina y humana. El siempre invita (a veces exige) la necesidad de estar en “vela” o “vigilantes”; lo que entendemos coloquialmente “a no bajar la guardia”. Ello implica, tanto continuar practicando (ofreciéndose) el Amor de El recibido (por su Gracia o carisma) con nuestro prójimo (cercano o lejano), como defenderse y defender a quienes confiamos en su Evangelio y a toda criatura por incorporarse a vivir en el.Actitud vigilante sabiendo que no son las personasnuestros verdaderos enemigos, sino “los espíritus malignos” que las conducen y ciegan nuestra hermandad, mantienen el odio permanente entre personas, la ruptura, como distorsionan sus mentes. Tanto, que crean leyes como la del Aborto, legalizando la muerte de toda criatura humana en gestación. Como últimamente la Ley de Género, que niega, de forma y pretende invalidar la propia naturaleza recibida del género.
Es por ello que esta “vigilancia” se muestre combatiente con “ la espada del Espíritu de la Palabra de Dios”, y desde la Fe, denuncie dichas leyes y sus perversas consecuencias. Vigilancia que debería materializarse, más que reparar injusticias, anularlas, actuando y participando en los círculos parlamentarios y estamentos jurídicos, donde se crean y desarrollan nuestras Leyes.
Tres Cantos (Madrid) a 28 de Agosto del 2016. Festividad de San Agustín. Manuel Armenteros Martos. NIF 30785144 N.
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