A un hombre caído, por la razon que sea, no se le pueden dar los mandamientos como terapia para que se ponga en pie y camine. La única terapia que Jesús utilizó fué.. "¡Padre, perdónales porque no saben lo que hacen!". Se llama Misericordia. Solo cuando la Misericordia alcanza el corazón del hombre caido, solo entonces es capaz de comprender que los mandamientos son Palabras de Vida que le reaniman y fortalecen.
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