jueves, 19 de septiembre de 2019

Quién

Quién, Mi Señor, subirá hasta Tu Monte Santo.
Por qué ladera ascenderá para escuchar, mejor, Tu voz.
Qué pendiente será, Mi Señor, la que podrán pisar unos pies descalzos.
Quién, mi Señor llegará a la cima más alta a contemplar… la Luz de Tu rostro, Luz que abarca la anchura del horizonte más elevado, invisible a la pupila del ser humano.
El de corazón puro y manos inocentes,
El de mirada limpia y serena en sus ojos,
El que antes descienda y se sumerja hasta cubrirle el barro,
El que renazca de nuevo y quede restaurado.
Y ...Mi Señor,
quién andará sobre la estela, que, como espejos, brilla en tu mar de plata,
quién Mi Señor logrará caminar sobre ella, sin miedo a vacilar.
El que avanza con espíritu firme,
el que mantiene su mirada hacia el resplandeciente sol cuya luz nunca se apaga.
El que escucha y cumple mi Palabra.
Mi Señor enséñame el sendero de la vida, enséñame a cumplir tu Palabra.
Tú sabes …soy pequeña y débil, mis manos son torpes y tropiezo con facilidad, cuanto ansía mi alma ser perfecta ante tus ojos, pero cuanto más me miras más imperfecta me veo yo, y caigo y me levanto y te digo: Purifícame Dios mío, hazme digna de vos, crea en mí un corazón puro, para que cuando te asomes desde tu morada Santa, a mirar, me sonrías desde el cielo.
(Loles)
comunidadmariamadreapostoles.com

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