En los primeros compases del Adviento la Iglesia nos presenta la figura de María escogida por Dios para ser la madre de su Hijo. El Ángel Gabriel anuncia la propuesta divina a María adolescente abriéndose a la juventud. Nos la imaginamos totalmente descolocada al oír el anuncio y es que Dios es experto en romper esquemas cuando propone su plan a alguien. Maria, la Inmaculada, solo acierta a preguntar al Ángel que como puede engendrar al Hijo de Dios si esto está a años luz de cualquier hombre; este le hace saber que será la Fuerza de Dios
la que fecundará a Jesús en su seno. Las propuestas humanas son posibles y razonables las de Dios imposibles y razonables desde su Misterio no desde nuestra mente; solo son entendibles entrando en su Misterio, el de Dios. He ahí la gran encrucijada de la Fe...dejarnos llevar por el Evangelio de los Imposibles para poder hacernos un hueco en el Misterio de Dios. Ante esta encrucijada de la fe el escéptico se arropa y envuelve en la realidad que percibe con sus sentidos y se conforma. El buscador de lo Transcendente da a Dios la oportunidad de que se le manifieste y le introduzca en su Misterio. Esto es lo que nos enseñó María de Nazaret cuando elevándose sobre lo visible dijo al Angel: ¡Hágase su Palabra - Imposible- en mi...!! Y se hizo.. aconteció la Encarnación de Dios.
Y recordemos que si bien la Encarnación del Evangelio en el corazón del hombre es imposible, Dios es experto en convertir lo imposible en posible"
(Antonio Pavía-Misionero Comboniano)
comunidadmariamadreapostoles.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario